Edición 195 - Comercio Colombia - Estados Unidos 2024          


Colombia Post-Colmotores GM: Retos y Oportunidades

Por Daniel Fajardo, senior counsel Holland & Knight


El pasado 26 de abril, los principales medios de comunicación del país confirmaron un rumor a voces que había circulado en diferentes medios con titulares como “General Motors cierra sus plantas de ensamblaje de vehículos en Colombia y Ecuador” y “General Motors cierra planta de Colmotores en Colombia”. Esta decisión, que refleja una coyuntura global en la industria automotriz donde la producción se desplaza hacia regiones de menor costo, invita a una reflexión profunda sobre el tipo de comercio e inversión que Colombia necesita, especialmente en relación con uno de sus principales aliados, Estados Unidos.

General Motors argumenta que el cierre se debe a una notable reducción en ventas: Colombia pasó de comercializar más de 300 mil unidades anualmente en sus mejores tiempos a solo 186.222 vehículos, es decir, 76.116 unidades menos que en 2022. Además, la planta operaba al 9% de su capacidad, con ventas de apenas 11 mil vehículos al año tanto en mercados nacionales como internacionales. Un factor crucial en esta decisión ha sido la apertura del mercado colombiano a través de tratados de libre comercio. Según el presidente de General Motors Sudamérica, “Eso lo que significa es que, de forma gradual, pero constante, comienza a recibir una presión competitiva grandísima. Tenemos TLC con Estados Unidos, que produce millones de carros; con Europa, que produce nueve millones de carros; desde el año pasado, con Corea, que produce cuatro millones.” Esta declaración resalta la intensidad de la competencia que enfrenta Colombia debido a los tratados de libre comercio con potencias automotrices globales.

Frente a este escenario, surge la pregunta: ¿hacia dónde debería dirigirse el comercio y la inversión con Estados Unidos? Si el objetivo es atraer inversiones que generen empleo, impulsen las exportaciones y creen valor agregado, Colombia debe fortalecer aquellos sectores donde posee ventajas competitivas. Es vital no perder competitividad frente a los países vecinos. Este desafío requiere una evaluación detallada de cómo podemos mejorar nuestra infraestructura, política industrial y capacidades tecnológicas. La meta es atraer inversiones que no se limiten a buscar mano de obra barata, sino que también fomenten un entorno propicio para la innovación y el desarrollo sostenible.

Mirando hacia el futuro, es esencial que Colombia realice ajustes en su política comercial y de inversión que respondan no sólo a las dinámicas globales, sino que también maximicen los beneficios de los tratados de libre comercio existentes. Esto podría incluir estrategias para promover sectores en los que Colombia tiene claras ventajas competitivas, como la agricultura, la tecnología y los servicios, asegurando un crecimiento inclusivo y sostenible. Más que competir únicamente en costos, la estrategia debe enfocarse en agregar valor a las exportaciones colombianas y fortalecer la posición del país en la cadena de valor global.

Mayo 2024