Arancel recíproco de Trump no afectaría las ventas del país.

13 de febrero de 2018

El mandatario afirmó que la medida sería contra quienes se aprovechan de EE.UU. El superávit estadounidense y el TLC existente protegerían las exportaciones nacionales.

En un día que estuvo marcado por la presentación del presupuesto para 2019 de Estados Unidos y el plan de infraestructura que prepara el gobierno, el presidente Donald Trump volvió a sorprender al asegurar que impondrá un ‘impuesto recíproco’ a aquellos países que se “aprovechan comercialmente de EE.UU.”, una medida que, sin embargo, no afectará al comercio exterior de Colombia.

“No podemos seguir permitiendo que las personas entren a nuestro país y nos roben y nos cobren aranceles e impuestos enormes y no les cobremos nada. Estados Unidos pierde grandes cantidades de dinero con China, Japón, Corea del Sur y muchos otros países. Vamos a imponer cargos a los países que se aprovechan de EE.UU.; algunos de ellos se denominan aliados, pero no son aliados comerciales”, declaró Trump.

Pese a la declaración, desde Colombia se desestimó la posible amenaza y se apuntó a que esta medida no afectaría al país.

“La normatividad internacional contempla que cuando existan acuerdos comerciales, no es posible, de manera unilateral, bajar o aumentar los aranceles. Para hacer alguna modificación se requiere abrir la negociación. Tendremos que esperar a que Estados Unidos ofrezca detalles sobre el anuncio presidencial pues el ‘impuesto recíproco’ afectaría tanto a exportadores hacia Estados Unidos, como a consumidores locales”, consideró la directora de la Cámara de Comercio Colombo Americana (Amcham Colombia), María Claudia Lacouture.

Además, como agregó Lacouture, “la balanza comercial es deficitaria para Colombia, y la estrategia en comercio exterior ha sido corregir o modernizar lo que él llama ‘malos acuerdos’ que dejan en desventaja a sus empresas.

De igual forma, la viceministra de comercio exterior, Olga Lucía Lozano, resaltó que “el Gobierno de EE.UU. no ha hecho público el listado de productos sobre los cuales aplicará este tipo de aranceles. Sin embargo, la oferta exportable colombiana entra al mercado de Estados Unidos con cero arancel, por el TLC que impide que este tipo de aranceles específicos impacten en su flujo comercial hacia ese país”.

Dinero para el muro

El presidente Trump asumió que el Gobierno mantendrá su déficit en la próxima década, al presentar una propuesta de presupuesto que solicita fondos para el muro en la frontera con México y contempla recortes en programas sociales y de protección del medio ambiente.

El presupuesto dotaría al Gobierno federal de US$4,4 billones durante el año fiscal 2019, que comienza el próximo mes de octubre, aunque no está claro que ese plan pueda salir adelante en el Congreso, dado que los legisladores ya aprobaron la semana pasada un ambicioso plan de gasto.

Lo que sí dejó claro la propuesta de la Casa Blanca es que Trump, que abogó en su campaña electoral por una mayor disciplina fiscal y por eliminar el déficit en las cuentas públicas, ha aceptado que no podrá cumplir ese objetivo tradicional de los republicanos.

Esta ampliaría el déficit en las cuentas públicas a US$984.000 millones en el año fiscal 2019, lo que supone un 4,7% del Producto Interno Bruto (PIB) y es casi el doble de lo que el plan de gasto presentado hace un año pronosticaba para el mismo periodo.

El Gobierno de Trump pretende, sin embargo, reducir gradualmente el déficit a partir de 2020, con el objetivo de situarlo en US$363.000 millones en 2028, lo que supondría el 1,1% del PIB.

La propuesta incluye una petición de US$1.600 millones para cercar unos 104 kilómetros (65 millas) de los 3.180 kilómetros de la frontera con México, en la zona de Texas. Trump pidió hace un año la misma cuantía para construir un muro en la misma área y en California, pero el Congreso no ha aprobado por ahora esa solicitud.

La Casa Blanca confía en que el Congreso les conceda US$3.200 millones y además, que les autorice otros US$18.000 millones para el muro como parte de una ley migratoria que sustituiría el programa DACA que ya finalizó.

Fuente: Portafolio