Edición 177 - Trabajo pertinente y talento humano 2022          


Trabajo oportuno y talento humano: Hacer uso de las herramientas legales y extralegales que contribuyen a una mejor forma de trabajar

Por Carolina Castro de la Torre, senior counsel Holland & Knight


Aunque se trata de un artículo enfocado a asuntos de talento humano, se inicia haciendo referencia a la legislación laboral, pues quienes lideran proyectos de recursos humanos y relaciones laborales, no solo deben tener la misma en el radar de manera permanente, sino que pueden utilizar la ley laboral como su mejor aliado para la creación de ambientes de trabajo sanos.

La legislación laboral vigente cuenta con un sinnúmero de herramientas que propenden el trabajo en condiciones justas e incentivan a adoptar mecanismos que garanticen el bienestar de los trabajadores no solo durante las horas que se dedican a trabajar, sino también en aquellos momentos destinados a no hacerlo, procurando encontrar ese famoso equilibrio entre la vida laboral y personal.

El trabajador, o la mano de obra si así quiere llamarse, es el mayor activo de la mayoría de las empresas independientemente de su tamaño, industria o dinámica comercial, y como ya se dijo, la ley laboral, más allá de ser vista como aquella que impone cargas y obligaciones a los empleadores, debe entenderse como la mejor herramienta para garantizar el funcionamiento de ese activo. La ley laboral establece las pautas mínimas de contratación, retribución y condiciones de trabajo que podrían clasificarse en dos grupos: (i) regulación en cuanto a compensación, y (ii) regulación en cuanto a bienestar y condiciones de trabajo. Así las cosas, vemos como las leyes laborales vigentes establecen normas acerca del pago de salario mínimo o pago de prestaciones sociales, las cuales se refieren a ese primer grupo, e igualmente normas que desarrollan el segundo grupo como lo son la obligación de contar con un reglamento de trabajo que fije las reglas del juego, la regulación en materia de otorgar dos días de la familia al año (Ley 1857 de 2017), la destinación de dos horas de la jornada para actividades de recreación y esparcimiento (Artículo 21 Ley 50 de 1990), la obligación de implementar una política de desconexión laboral, entre tantas otras.  

Hacer un uso consciente de estas disposiciones legales, entendiéndolas como herramientas, y no como obligaciones legales que deben cumplirse por salir del paso, se traduce en eficiencia, pues se estaría frente a situaciones de obligatorio cumplimiento de las cuales el empleador inteligente, saca el mayor provecho que ellas tienen para ofrecer.

Pero no se debe olvidar que la legislación laboral establece mínimos y no máximos, y por consiguiente los empleadores no están limitados a las disposiciones legales en materia de bienestar, sino que pueden ofrecer, reconocer e implementar todas aquellas acciones tendientes a mejorar el ambiente de trabajo, siempre y cuando excedan los mínimos contenidos en la ley. Aunque todos estos mínimos contenidos en la ley representan gastos significativos para los empleadores, se ha demostrado que invertir en el bienestar de los trabajadores se revierte con creces, y se puede hacer a través de mecanismos con costos asociados bajos o moderados.

El empleador puede dar a sus trabajadores beneficios que aborden los dos tipos de grupos ya mencionados (compensación y bienestar), ofreciendo en el primero de ellos primas o incentivos adicionales al salario y a las prestaciones y pagos legales, por ejemplo. Pero donde realmente se abre un campo de oportunidad es en el segundo grupo, en donde el empleador cuenta con millones de alternativas que garanticen un buen ambiente de trabajo y que no representan costos significativos como lo pueden ser: contar con manuales o políticas de convivencia y bienestar u ofrecer beneficios que son ocasionales o de poca ocurrencia pero generan un alto impacto de satisfacción por la necesidad específica que suplen, como por ejemplo, el reconocimiento de días de descanso compensado por situaciones esporádicas como grados, matrimonio, luto por fallecimiento de mascotas, cumpleaños, nacimiento de hijos entre otros.  

Julio 2022