Por Thomas Schoett, vicepresidente de Global Forwarding LATAM de C.H. Robinson
Las proyecciones globales del transporte marítimo, culminó un año retador, donde se pueden seguir enfrentando algunas aguas turbulentas, anticipando un 2024 con desafíos e incertidumbres. Esto, según la visión de Thomas Schoett, vicepresidente de Global Forwarding LATAM de C.H. Robinson.
Del pico al valle
A medida que el mundo se recuperaba de la pandemia y la demanda aumentaba a partir de mediados de 2021, el auge del transporte marítimo como consecuencia de la pandemia generó enormes ganancias, motivando a las líneas navieras a ordenar la construcción de más barcos y contenedores. Sin embargo, la demanda de los años siguientes no fue como lo proyectado. Esto resultó en un exceso de capacidad en 2023 que mantuvo bajas las tarifas de flete y las ganancias, generando un panorama que puede continuar en 2024.
McKinsey & Company indica que este “exceso significativo” de nuevos buques podría llevar las tarifas a niveles de coste marginal, devolviendo al sector al patrón de la última década: bajos beneficios que son insuficientes para cubrir el coste del capital.
Por otro lado, el Consejo Marítimo Internacional y del Báltico (Bimco), una de las mayores asociaciones internacionales de navieras que representan los intereses de la industria, espera que la actual tendencia a la baja en la industria, que inició en 2022 y se intensificó en 2023, probablemente persistirá en 2024 y 2025.
No es fácil seguir siendo “Verde”
La descarbonización es desafío importante para la industria del transporte marítimo porque no existe un plan claro y la desaceleración económica probablemente lo hará más difícil. En este ámbito destaca la entrada en vigor del Sistema de Comercio de Emisiones (ETS) de la Unión Europea que comenzó el 1 de enero de 2024, la cual exige que los barcos que hagan escala en puertos de la Unión Europea (UE) paguen por sus emisiones de carbono.
Ante este entorno desafiante, el transporte global sostenible es un largo viaje donde los invito a trabajar con diferentes estrategias junto a su proveedor de logística, en función de sus objetivos y recursos disponibles. Un excelente primer paso es utilizar Emissions IQ de C.H. Robinson para establecer una base de referencia para su huella de carbono y utilizar sus datos de envío para reducir las emisiones en toda su cadena de suministro. Si ya ha establecido una línea de base, nuestra amplia red de expertos y herramientas de tecnología para la sostenibilidad lo ayudarán a avanzar más en su planificación de envíos sostenibles.
Conflicto en el Mar Rojo y desafíos del Canal de Panamá
Por otro lado, el conflicto en el Mar Rojo y los bajos niveles de agua, por la sequía en el Canal de Panamá, han provocado retrasos y perturbaciones en el mercado mundial del transporte marítimo. Ante estas interrupciones, los transportistas deben lidiar con capacidad y equipos limitados, tiempos de tránsito más prolongados y competir por espacios en contenedores. Para enfrentar estos desafíos, es posible que los transportistas deban reservar sus envíos con mayor anticipación y considerar el uso de de transporte alternativos, como el transporte aéreo y el envío de carga menor a un contenedor (LCL).
Con un crecimiento de la oferta global proyectado del 9% y un crecimiento de la demanda inferior al 2% en 2024, puede ser difícil que las tarifas de los fletes marítimos aumenten, o incluso se mantengan por encima de los niveles de equilibrio.
De hecho, algunas líneas navieras ya están reduciendo la oferta mediante cancelaciones de itinerarios, salidas en blanco y reducción de la velocidad de navegación, lo que probablemente continuará en 2024. Esto puede generar algo inestabilidad en los itinerarios y llegadas, además de tiempos de tránsito más largos.
Proyecciones en América Latina: un año brillante
En el caso de Latino América, se espera que las tasas crezcan más del doble del promedio mundial, impulsadas en parte por la nearshoring (relocalización de las cadenas de suministro).
Es de gran importancia estar preparado y ser flexible en un ambiente dinámico y también de trabajar con un proveedor de logística confiable para desarrollar planes de contingencia.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) espera que el Producto Interno Bruto (PIB) de la región crezca un 1,5% en 2024, mostrando resiliencia ante un escenario económico complejo.
Por lo tanto, a pesar de los desafíos actuales en la región y el mundo que hacen que la cadena de suministro sea un desafío, se espera que 2024 sea un año brillante para América Latina. La región, gracias a su ubicación estratégica y su creciente infraestructura, está preparada para convertirse en un centro para diferentes industrias con operaciones que buscan ubicaciones alternativas y, aunque gestionar las cadenas de suministro globales puede ser complejo, diversificarlas será clave. De hecho, se espera que nuevas rutas comerciales desde China, concretamente desde el puerto de Dalian, incrementen el comercio con nuestro continente.
Oportunidades en Latinoamérica
Se espera una demanda récord en Latinoamérica persista en 2024, especialmente en México a medida que se consolida el nearshoring.
En C.H. Robinson, estamos comprometidos a ayudar a nuestros clientes a superar estos desafíos y aprovechar las oportunidades en América Latina. Contamos con la experiencia, la red y la tecnología para brindar soluciones confiables y eficientes para sus necesidades de envío. Estamos seguros de que podemos ayudarle a alcanzar sus objetivos y hacer crecer su negocio en 2024 y más allá.
Febrero 2024