Edición 179 - Tecnología & Telecomunicaciones 2022
Bootcamp vs. educación tradicional: las opciones de formación de talento tecnológico
Por Vanessa Aranibar, Head of Content de Laboratoria
Para dar respuesta a la incertidumbre, el mercado laboral ha sufrido una serie de modificaciones basadas en cuestionamientos, como la brecha entre la educación superior, el perfil de egreso de las y los estudiantes, y las necesidades de las empresas.
Según una encuesta del Banco Mundial de 2019, el 24% de las empresas en el mundo declaró que una fuerza de trabajo con educación inadecuada es una limitación importante para su crecimiento. En América Latina y el Caribe esta cifra se eleva al 32%, la más alta de todas las regiones.
Los sistemas educativos y de formación para el trabajo no han sido capaces de dar respuesta rápida a la necesidad imperiosa de contar con talento digital para la nueva economía. Esta realidad se convirtió en terreno fértil para otras alternativas formativas, como los bootcamps.
Los bootcamps, o escuelas de programación intensivas, surgieron en el 2011. Pueden definirse como escuelas al margen de los sistemas educativos, no acreditadas por una autoridad educativa tradicional y sin currículum fijo. Como el BID señala son, en esencia, programas disruptivos, flexibles, innovadores y adaptables a las necesidades del sector tecnológico y productivo.
Según Ironhack, las principales diferencias entre un bootcamp y la educación tradicional suelen ser:
- La duración del programa: a diferencia de las universidades e institutos, los bootcamps suelen tener una duración de semanas o meses.
- Teoría vs práctica: los cursos universitarios cubren una gran cantidad de información teórica. Los bootcamps cubren lo esencial y tienen un fuerte componente práctico.
- Flexibilidad y ubicación: otra diferencia entre los bootcamps y las universidades es la ubicación. Los bootcamps ofrecen la opción de estudiar en remoto, lo cual es un gran beneficio para muchas personas. Las universidades requieren de la asistencia en persona al campus, por lo que limita el acceso.
Además, algunos de los beneficios que ofrecen los bootcamps para la formación de talento tech son:
- Acceso a la educación: En Latinoamérica, solo entre el 2% y 4% de la población joven concluye una formación en educación superior. A nivel regional, menos del 43% de las escuelas primarias y menos del 62% de los colegios secundarios tienen acceso a internet con fines pedagógicos. Por esta razón, según Unesco, democratizar la educación es imperativo en los países de la región y el mundo, en especial la educación de habilidades digitales. Con una necesidad de 149 millones de nuevos empleos en el sector tecnológico para el 2025 (Banco Mundial), la formación en bootcamps se convierte en una alternativa viable para aquellas personas que, en situaciones regulares, no podrían recibir una educación universitaria tradicional.
- Acceso al talento: Por otro lado, los bootcamps también son atractivos para los empresarios que buscan colaboradores/as calificados. Course Report señala que la mayoría de los y las graduadas de bootcamps encuentran trabajos full-time y un 79% de ellos señalaron que en sus nuevos empleos necesitan aplicar las habilidades técnicas aprendidas en los bootcamps.
Para Laboratoria es necesario continuar con los esfuerzos para mejorar el nivel de educación de Latinoamérica, así como generar mejores oportunidades de trabajo. Sin embargo, los constantes cambios demuestran que se necesitan políticas y estrategias diferentes, ahora y a largo plazo, para reducir la brecha de talento en la región. Como señala Mariana Costa, CEO y Co-fundadora de Laboratoria, “los bootcamps por sí solos no son la solución a todos nuestros problemas. Para lograr esto, la pieza más importante es transformar nuestra cultura de aprendizaje para que no tenga principio y fin. Sea en bootcamps, universidades o empresas, debemos cultivar una práctica de aprendizaje continuo que nos permita adaptarnos a un mundo laboral donde el cambio es la constante”.
Desde todos los frentes económicos y sociales se debería impulsar y enfocar los cambios de mentalidad y de sociedad en el sistema educativo. El continuo cambio generalizado exige que el también la educación evolucione y la tecnología y la digitalización sean transversales. Laboratoria destaca su importancia.
Septiembre 2022